LOS TIEMPOS DEL VATICANO
Carlos Hiram Culebro Sosa
En 1992 el papa Juan Pablo II, Karol Wojtyla, visitó Chiapas, seguramente con el propósito de acercarse a las comunidades indígenas y ver de manera directa lo que estaba haciendo el Obispo de San Cristóbal las Casas, Samuel Ruiz García.
Su primera determinación fue realizar el evento en Tuxtla Gutiérrez con el obispo Felipe Aguirre Franco, quien era un hombre muy querido y respetado en su diócesis, que evitó confrontaciones entre los diversos sectores étnicos y socioeconómicos y finalmente fue trasladado como Arzobispo en Acapulco, jerarquía que no alcanzó Samuel Ruiz. Aguirre Franco sigue siendo muy respetado, ahora como obispo emérito en la Capital de Chiapas.
El Gobernador en ese entonces, Patrocinio González Blanco Garrido, ni creyente ni practicante, organizó personalmente la recepción del papa, que pudo haber sido ensombrecida porque un avión de Aviacsa se accidentó un día antes de la llegada de Wojtyla y ahí murió entre otros más- el obispo Luis Miguel Cantón Marín, quien radicaba en Tapachula. La sátira popular decía que Patrocinio se había equivocado de Obispo; su relación con Samuel Ruiz tuvo algunas fricciones.
Ante esa circunstancia el Gobernador gestionó y el papa accedió a una breve visita a la Catedral de Tuxtla para honrar v bendecir al obispo fallecido y demás víctimas del accidente aéreo; a la vez, pidió que no hubieran expresiones de luto porque no le quería quitar el regocijo al pueblo de Chiapas por la visita de Juan Pablo II.
Un encuentro muy concurrido (en Tuxtla Gutiérrez) se realizó en el área denominada Pumpuchuti, que después fue plantada por niños y jóvenes con miles de árboles de primavera, para dejarle a Tuxtla un recuerdo de esa reunión espiritual y crear una área verde que serviría como centro de convivencia de los tuxtlecos. Posterior, el gobernador Pablo Salazar Mendiguchía, ministro de otra religión, destruyó ese refugio y se asegura que hizo negocio particular con esos terrenos, al vender en pedazos ese lugar, terminando por desaparecer como zona arbolada.
Ahora el papa Francisco (Jorge Mario Bergoglio), volverá a Chiapas en febrero del año venidero, posiblemente para darle una vuelta a la hoja y a la historia, hacer un reconocimiento a Samuel Ruiz y tratar de iniciar un proceso para su canonización como protector de los indios. El nuevo papa, como buen jesuita, quiere ganar ascendiente con los pueblos originales que hoy ya tienen incrustada una iglesia musulmana, la única de México, que día a día gana adeptos en esa región, la que puede volver a ser conflictiva si persiste la indiferencia del gobierno federal.
La bandera de Samuel Ruiz suena oportuna, sin que le importe al nuevo papa la reacción de la comunidad coleta y además, sin reflexionar que ese obispo durante su gestión, perdió la mitad de sus feligreses que se convirtieron a otras religiones cristianas, o a diversas sectas.
Sin duda, religiones y migraciones serán, junto con la carencia del agua, los temas del siglo XXI y mucho habremos de ver.Por fis ponlo en artículo de opinión. Puedes echarme la mano poniendo una foto del papa francisco.