Algunas carnicerías han cerrado
Karla Solís/Trascender Online Noticias
TAPACHULA, CHIS. (OEM-Informex).- Tablajeros de la región aseguran que mantienen los mismos precios de venta del año pasado en los productos cárnicos sin embargo la situación económica que se vive en la actualidad es la causa primordial de bajas ventas, prueba de ello ha sido además el cierre de varias carnicerías de los mercados públicos de Tapachula.
El Presidente de la Unión de Tablajeros de Tapachula, Andrés Ruiz Romero manifestó, que desde finales desde mediados del año pasado y a la fecha se estima el cierre de un 50 por ciento del total de carnicerías ubicadas en los mercados San Juan, Sebastián Escobar y Soconusco, atribuido al desplome de ventas como a la inseguridad que también les ha pegado duro.
El sector vive la situación más crítica de su historia, porque al no haber circulante, los propietarios de carnicerías deciden cerrar debido a que las ventas del día no alcanzan ni para cubrir los créditos con proveedores, ni el pago de los servicios básicos de los locales, los precios de venta por kilogramo oscila entre los 120 y 140 pesos, aseveró.
Dijo, que aun cuando los propietarios de carnicerías mantienen los mismos precios a fin de obtener más ventas, la falta de liquidez en la región genera una crisis en el sector, en la actualidad el encarecimiento de productos básicos y servicios debido al gasolinazo genera que las familias dejen de consumir carne, porque su ingreso ya no les alcanza.
Enfatizó, que hace unos años atrás llegaban a obtener hasta 15 mil pesos de venta al día, pero ahora los fines de semana que es cuando mayor afluencia se presenta apenas y llegan a vender 6 mil pesos, recursos que es insuficiente para cubrir sus costos de operación, lo que ha obligado a muchos a cerrar de manera definitiva.
Otro factor que los afecta en la venta del producto en supermercados, lugares donde ofrecen el kilogramo de producto a un menor precio, sin embargo la calidad del producto porque pasan días en refrigeración y la procedencia de la misma es dudosa.
Añadió, que el producto que se expende en estos lugares viene de otros estados del país, pero pueden ser de animales enfermos o robados, razón por la cual no pueden entrar al rastro, por lo que si bien las familias se ahorran unos cuantos pesos pero al no saber la calidad del producto arriesgan su salud.