Comunicado/Trascender Online Noticias
La pediculosis -nombre de la infestación por piojos-, suele ser producida por el descuido en la higiene persona y del contacto con otras personas que la padecen, y es la falta de aseo la que permite que estos aniden en el cuero cabelludo y se propaguen en el núcleo familiar, los grupos sociales y educativos.
Nelson Orantes Sandoval, médico adscrito a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 25 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tuxtla Gutiérrez, explicó que existen tres tipos de pediculosis: del cuero cabelludo -que es el contagio más común-, del cuerpo y del pubis, y todas son causadas por diferentes tipos de piojos.
Estos son insectos parásitos que miden de tres a cuatro milímetros; son aplanados y no tienen alas, toman el pelo como su hábitat natural y se alimentan de la sangre del cuero cabelludo; por lo que este padecimiento debe ser tratado en cuanto se detecta para evitar la infestación.
La forma más frecuente de adquirir piojos es por el contacto cercano. Sin embargo, como pueden sobrevivir hasta un día fuera del ser humano, se transmiten por compartir objetos como toallas, gorras, cascos, peines, cepillos y ropa; el padecer de pediculosis conlleva también la inflamación y enrojecimiento de la piel en la zona afectada, acompañada de escoriaciones, por el constante rascado, ya que la comezón es el síntoma fundamental de esta infección.
Afecta principalmente a niños y adultos jóvenes, sobre todo aquellos que prefieren el cabello largo, pues es más difícil cuidarlo y mantenerlo limpio. La infestación, además, puede extenderse a cejas y pestañas, pudiendo ocasionar conjuntivitis.
La manera de erradicar los piojos, cuando ya se alojaron en el cuerpo, es mediante el aseo adecuado del cabello con productos que contienen piretrinas, además un cepillado enérgico diario con un cepillo escarmenador y de preferencia usar el cabello corto.
Orantes Sandoval señaló que para que para prevenir la aparición de estos insectos, se recomiendan hábitos adecuados de higiene personal, que incluyen buen aseo corporal, de ser posible cambiar la ropa diariamente, y no utilizar artículos ajenos para su cuidado, como peines o cepillos, ya que la mala higiene, subrayó, siempre está detrás de una infestación de piojos.