Venezuela: Gobierno niega que se haya consumado un golpe de Estado
La Cancillería de Venezuela dijo hoy que «es falso» que se haya consumado un golpe de Estado en el país por parte del Gobierno de Nicolás Maduro, ello luego que el Tribunal Supremo de Justicia decidiera asumir las competencias de la Asamblea Nacional. «Sus instituciones han adoptado correctivos legales para detener la golpista actuación de los parlamentarios opositores en desacato a las decisiones emanadas del máximo Tribunal de la República», manifestó la Cancillería mediante un comunicado.
Esta reacción surge como respuesta a la postura adoptada por un grupo de países de la región que han manifestado su preocupación por la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de asumir las competencias del Parlamento. Según el Ministerio de Exteriores de Venezuela, estos Gobiernos han conformado una «coalición intervencionista» pues, asegura, no han procesado aún la derrota recibida hace apenas unas horas en la Organización de Estados Americanos (OEA) frente «al plan injerencista contra Venezuela» y ahora han desatado una «histérica campaña».
«Venezuela repudia la arremetida de los Gobiernos de la derecha intolerante y pro-imperialista de la región, dirigida por el Departamento de Estado y los centros de poder estadounidenses, que mediante falsedades e ignominias pretenden atentar contra el Estado de Derecho en Venezuela y su orden constitucional», se indica en el escrito.
La Cancillería venezolana señala también que el secretario general de la OEA, Luis Almagro, estaría intentando imponer ese supuesto plan de injerencia «en franca violación a la legalidad internacional y nacional». A estos Gobiernos, se indica en el comunicado, «los motiva la venganza y la intolerancia político-ideológica contra la sólida y vigorosa democracia venezolana y su modelo inclusivo de derechos humanos, mientras ellos practican la violación sistemática de derechos humanos que reprimen violentamente a la disidencia política», cita.
Entre los países del continente que han manifestado su preocupación por la decisión del Supremo venezolano se encuentran Colombia, Argentina, Chile, Brasil, Perú, Panamá, Costa Rica, Guatemala, Canadá y Estados Unidos.
Por Diario Correo