Venezuela acusa a México de «construir muros con Latinoamérica» para «congraciarse» con Estados Unidos
El Gobierno de Venezuela ha acusado a México de «construir muros con Latinoamérica» para «congraciarse» con Estados Unidos, en referencia a las recientes declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores mexicano, Luis Videgaray, quien este jueves reveló que su Gobierno estaba trabajando con otros países de la región para fijar una posición común sobre la posible suspensión de Venezuela de la Organización de Estados Americanos (OEA) por una «ruptura del orden democrático» y que ha cristalizado esta madrugada en una declaración conjunta del llamado «grupo de los 15».
«La República Bolivariana de Venezuela rechaza las insólitas y serviles declaraciones del canciller de México, Luis Videgaray», ha denunciado la ministra de Relaciones Exteriores venezolano, Delcy Rodríguez, a través de su cuenta oficial de la red social Twitter.
En sus mensajes, la canciller venezolana ha asegurado que con estas afirmaciones queda «suficientemente demostrado» el «concierto» entre el Departamento de Estado de Estados Unidos y «la derecha regional» con el objetivo de «agredir y atacar» al país.
«El canciller Videgaray construye muros con América Latina en lugar de defender y atender los intereses y derechos soberanos de su pueblo», ha criticado, antes de acusarlo de agredir a a Caracas «para congraciarse con sus dueños imperiales. «Cree que así el pueblo mexicano olvidará su traición», ha añadido.
Por su parte, ha insistido en que Venezuela «es un país con tradición antiimperialista, de pueblo noble y valiente» y que «jamás negociará su independencia y soberanía» con nadie.
Videgaray ha detallado que México, Chile, Perú, Colombia, Argentina, Guatemala, Canadá y Estados Unidos están intentando pactar una posición común tras el llamamiento que hizo el secretario general de la OEA, Luis Almagro, a activar la Carta Democrática contra Venezuela.
«Aún la estamos construyendo», ha dicho, si bien ha avanzado que contendrá una petición al Gobierno y a la oposición en Venezuela para que busquen juntos la forma de restablecer «la normalidad democrática» en la nación caribeña.
Videgaray ha reconocido que esta iniciativa supone un cambio en la política de México sobre el caso de Venezuela, ya que hasta ahora ha guardado silencio. «No deberíamos seguir indiferentes, no podemos seguir indiferentes», ha esgrimido.
‘Informe Almagro’
El pasado 14 de marzo, Almagro dio a conocer su informe sobre la situación en Venezuela, en el que asegura que se ha producido «una ruptura total del orden democrático» y que, por tanto, el país debería ser sancionado con la suspensión como miembro de la OEA.
El líder regional comparó incluso al presidente venezolano, Nicolás Maduro, con dictadores latinoamericanos como Jorge Videla, Augusto Pinochet y Alberto Fujimori. «Es nuestro trabajo librar a cualquiera de nuestras naciones de esos infortunios», dijo.
No obstante, el excanciller uruguayo se mostró seguro de que la suspensión de la membresía venezolana de la OEA será breve y para ello instó al Palacio de Miraflores a dar «una señal inequívoca de que se retoma el rumbo institucional» en el país.
En concreto, pidió «que se realice en los próximos 30 días un llamado a elecciones generales, la liberación de los presos políticos, la validación de las leyes que han sido anuladas, así como la elección de un nuevo Consejo Nacional Electoral y un nuevo Tribunal Supremo de Justicia, conforme a los procedimientos establecidos en la Constitución».
Por su parte, el Gobierno de Estados Unidos ha asegurado este jueves que Washington considera que Venezuela no debería ser expulsada de la OEA a través de la activación de la Carta Democrática, que contempla la suspensión del país en el organismo, si bien ha señalado que es necesario que se celebren elecciones para resolver la crisis que enfrenta el país.
Debate político
En respuesta, Maduro ha calificado a Almagro de «basura de ser humano» y ha asegurado que responderá «en todos los planos -político, diplomático, y más allá-, para defender la dignidad de Venezuela» porque «le asiste la razón, la moral, la causa histórica».
La misión de Venezuela en la OEA, por su parte, ha denunciado que el secretario general «está violando los principios de la no intervención en los asuntos internos de Estado y las normativas internas de la organización, que señalan que los espacios del órgano internacional no deben ser usados con fines políticos».
El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, el líder opositor Julio Borges, ha sostenido que «la Carta Democrática no es un llamado a una intervención extranjera», sino «a la intervención del pueblo a través del voto» con elecciones anticipadas, «la única manera de lograr un cambio democrático».
«Nos parece importante contestarle a Maduro que traición a la patria es lo que él está haciendo al no permitir el voto en el país», ha espetado Borges, de acuerdo con un comunicado difundido este jueves por la Mesa de Unidad Democrática (MUD), coalición opositora.
Por Economíahoy
