Marvin Bautista
Tapachula.- El anuncio del ajuste al salario mínimo para el 2017 deja muchas preguntas, así como polémica, ya que los trabajadores lo consideran un aumento raquítico en comparación con el costo de los servicios y productos más elementales del consumo diario, sobre todo en la frontera sur, una de las zonas más desprotegidas para el sector obrero.
El Secretario General de la Confederación Obrera Revolucionaria (COR) del estado de Chiapas, Teodoro Vázquez Castillo, dio a conocer que es necesario que los encargados de establecer las políticas en el país, realmente se acerquen a los sectores productivos y conozcan las verdaderas necesidades de la sociedad, ya que la situación de la clase trabajadora es cada vez más complicada y los ingresos son insuficientes para suplir sus necesidades.
Dijo que ante el aumento de siete pesos al salario mínimo en el país, los representantes de los trabajadores no quedaron conformes, ya que hubo un momento en que había un ofrecimiento mayor, pero nunca se pudo establecer, lo cual es lamentable, porque el gobierno nunca toma en cuanta la opinión de los sectores, que son quienes conocen de fondo las condiciones de la clase obrera.
Señaló que al no existir estímulos, se llega a caer en un círculo vicioso, donde la falta de interés de los trabajadores por la capacitación es en un muchas ocasiones el reflejo del cumplimento de las ofertas de los patrones, lo cual se traduce en mano de obra poco competitiva y a su vez poco remunerada.
Yo no se de donde se basaron los que aprobaron el aumento, porque no alcanza para nada, es insuficiente, aunque un factor a favor de los trabajadores que las empresas ya no pagan un salario abundó
Finalmente el representante de la clase obrera en el estado, mencionó que mientras las autoridades defienden sus proyectos y los trabajadores exigen un mejor escenario, ya que la competencia laboral es cada día más dura, pues los sectores productivos demandan un trabajador más competente, con la promesa de tener un mejor salario. (Fuente: InterMEDIOS)