Durante el evento de presentación del pronunciamiento, realizado al medio día uno de los accesos principales de la Cámara de Diputados, la representación de las iglesias cristianas de todo el país, consideró como inviable la iniciativa del Ejecutivo Federal.
CIUDAD DE MÉXICO.- Representantes de más de dos mil iglesias integrantes de la Unión Nacional Cristiana por la Familia acudieron a la Cámara de Diputados para externar su desacuerdo con la iniciativa que pretende legalizar el matrimonio y la adopción homosexual.
Solicitaron se abra un diálogo nacional y que se respete la creencia, el sentir y la identidad de la mayoría de los mexicanos que conciben el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer.
Las iglesias cristianas en México pidieron no ser discriminados por sus creencias religiosas y en ese sentido pidieron respeto para con una de las instituciones pilares de su pensamiento, como lo es el matrimonio formado entre un hombre y una mujer, que social y antropológicamente constituye la base de la sociedad y del desarrollo idóneo de los hijos.
Hasta la sede de la Cámara de Diputados llegaron más de 200 jerarcas de las distintas iglesias Cristianas con registro legal en México, encabezados por Samuel Sánchez Armenta, Obispo Presidente de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús; Elder Benjamín de Hoyos Estrada, Presidente de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos Días, sede México; así como Julio César Meléndez Olguín, Superintendente de la Iglesia de Dios del Evangelio Completo, quienes dieron lectura al pronunciamiento en presencia de diputados de diversos partidos.
En el pronunciamiento público dirigido a los diputados Jesús Zambrano, Presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados y al legislador Cesar Camacho Quiroz, Presidente de la Junta de Coordinación Política, así como a legisladores y legisladores de la LXlll Legislatura del Congreso de la Unión, advirtieron que la discriminación no se combate discriminando a otros.
Por El Financiero