El Estado/Agencia
Tapachula.- Maloliente sorpresa se llevaron los trabajadores y personal de la Rectificadora de Motores Peña, cuando descubrieron que la comida que compraron en Pollo El Granjero se encontraba en mal estado.
No es posible que una filial de prestigiado pollo campero venda pollos estilo campero, descompuesto, a punto de engusanar se encontraba, informaron los afectados en Tapachula
La sucursal se encuentra en la 28 calle oriente sin número, entre la novena y la once avenida sur en la colonia Calcáneo Beltrán, en la cual, incluso, cuando se tomó gráficas del lugar, un empleado buscó un arreglo con el periodista, en lugar de buscar dar solución y dejar de vender alimentos contaminados.
Los agraviados señalaron que fue desde el pasado 26 de noviembre, cuando a las 16:43 horas decidieron comprar un pollo entero con cuatro órdenes de papas, pagándole al cajero de nombre Vicente Álvarez la cantidad de 105 pesos de acuerdo al ticket de compra de la caja número 0054058.
En ese momento no se sintió un olor fétido pero al llegar al taller varios de los compañeros se percataron del olor además de partes del animal se hallaban de un color verde, algo que puede derivar en una enfermedad transmitida por alimentos.
Por lo que varios trabajadores volvieron el estómago al oler dicho producto, por lo que la misma persona, que fue a comprar dicho pollo fue a devolverlo hablando con el cajero responsable presentándole el ticket indicando las causas, el por qué devolvía dicho producto el cajero de nombre Vicente Álvarez le indicó que ya no le podía devolver el dinero, que le daría otro pollo.
Ante la respuesta, el cliente exigió la devolución de su dinero, pero les negaron a devolver el importe por lo que se retiró y es cuando entre sus compañeros decidieron darlo a conocer a la opinión pública.
Tengan cuidado para comprar pollo en Pollo Granjero, chequen el producto, ya que el mismo cajero aseguró que como vine también han venido varias personas a reclamar y no se les devuelve el dinero.
Los agraviados solicitaron la intervención de la Jurisdicción Sanitaria para que envíe a verificar que los establecimientos cumplan con la norma establecida en cuanto a manejo de alimentos inocuos.