El Estado
Nuevamente, madres y padres de familia se manifestaron frente a las instalaciones del Jardín de Niños Fray Víctor María Flores, para exigir la renuncia de la directora Angelina Gonzales Velasco, quien ha sido acusada de maltrato psicológico hacia los menores.
En ese sentido, María Teresa Gastelum a nombre de las madres de familia criticó el hecho de que encerrarán a su hijo bajo llave solo por andar corriendo en el salón de clases.
Agregó que se trata de una afectación psicológica importante hacia el infante, sumado a que tienen conocimiento de otros cuatro casos similares; yo pido la destitución definitiva de la directora, por órdenes de ella también las maestras encierran a los niños en los baños o en salón les ponen candado, condenó.
Por ello, Teresa Gastelum informó que tomaron las instalaciones de la institución y estarán bajo esa condición hasta que exista una solución a la demanda que tienen; narró que tuvieron un acercamiento con la supervisora de la zona, sin embargo, la respuesta no fue la esperada porque la suspensión de la directora solo es temporal.
Describió que el salón de primer grado se mantiene bajo llave a pesar del riesgo que significa para los pupilos que se encuentran al interior, sobre todo, cuando se presenten movimientos telúricos o algún incendio.
Es importante mencionar que a las afueras de la institución se observaron diferentes cartulinas con leyendas como las siguientes: Angela, ¡Pura comida de porquería!, ¿Se la darías a tus nietos? ¡Fuera, Fuera!, ¿Dónde están los Derechos Humanos?, ¡La omisión también es un delito!, tu silencio también te convierte en cómplice, ¡Basta de corrupción!
Además, es preciso informar que también se colocaron diferentes copias de los documentos que han sido entregados a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), dirigida por Juan Oscar Trinidad Palacios; el escrito tiene fecha de recibido en marzo de 2013, sin embargo, hasta la fecha no se tiene una respuesta concreta a tal solicitud.
Asimismo, destacan hojas enviadas al Comité de Padres de Familia por otras anomalías cometidas como regresar a los alumnos en el transporte escolar sin antes avisar a algún familiar, pues se trata de niños que no superan los seis años de edad y, por ende, no cuentan con las habilidades necesarias para moverse en la ciudad.