Día sangriento en Irak; EI reivindica atentados
Bagdad. Un atentado suicida con un camión bomba en una zona comercial del centro de Bagdad dejó al menos 125 decesos y 200 heridos ayer, mientras se conmemoraba el final del Ramadán, informaron las autoridades. Además, otra explosión dejó un muerto.
La primera acción, reivindicada por el Estado Islámico (EI), fue la más mortífera en los últimos meses en la capital de Irak. Ocurrió pese a una serie de recientes triunfos contra los extremistas, incluso la captura de Faluya.
La bomba estalló poco después de la medianoche en una zona comercial concurrida en el distrito de Karada, matando a 125 personas e hiriendo a 187, de acuerdo con un policía. Dijo que entre los muertos hubo 25 niños, 10 mujeres y seis oficiales.
Karada es una importante zona comercial donde hay tiendas de ropa, joyas, restaurantes y cafeterías y estaba repleta de clientes que se preparaban para festejar el miércoles el Eid al-Fitr, el día en el que los musulmanes marcan el final del Ramadán. La mayoría de las víctimas estaba dentro de un centro comercial de varios pisos, donde muchas personas fallecieron quemadas o sofocadas, según la policía.
Se trata del peor atentado en Irak desde julio de 2015. Fue como un terremoto, dijo Karim Sami, un comerciante de 35 años. Iba para mi casa cuando vi una bola de fuego con una explosión estruendosa, agregó.
Estaba tan asustado que regresé y comencé a llamar por teléfono a mis amigos, pero nadie respondió. Dijo que uno de ellos murió.
El Estado Islámico reivindicó el ataque en un comunicado publicado en internet, recalcando que atacó deliberadamente a los chiítas. La nota no pudo ser verificada de forma independiente. Pudo verse a bomberos y civiles ayudando a cargar a los muertos, envueltos en mantas y sábanas. Salía humo del centro comercial, que estaba rodeado de restos de vehículos quemados. Había un grupo de mujeres sentadas en el pavimento, llorando por sus seres queridos.
En otra zona de Bagdad, una bomba a la orilla del camino estalló en el vecindario chiíta de Shaab, matando a cinco personas e hiriendo a 16, de acuerdo con un policía. Nadie se responsabilizó del atentado, pero tenía las características de los realizados por el Estado Islámico.
Las cifras de muertos y heridos fueron confirmadas por responsables de la policía y hospitales.
Horas después del ataque con el camión bomba, Haider al-Abadi, primer ministro de Irak, visitó la zona. Una multitud lo responsabilizó de los atentados y lo tachó de ladrón. El premier prometió castigar a las bandas terroristas que perpetraron el atentado. Además, declaró tres días de luto oficial en todo el país.
En el último año, las fuerzas iraquíes han ganado terreno ante los extremistas, al retomar la ciudad de Ramadi y los pueblos de Hit y Rutba, en la provincia de Anbar.
México condena acciones. El presidente Enrique Peña Nieto expresó su solidaridad con Irak, tras los atentados. En su cuenta de Twitter, el mandatario escribió: Nuestra solidaridad con el pueblo y gobierno iraquí, por los trágicos hechos de violencia que han cobrado más de un centenar de vidas.
Por El Universal