Con la práctica de la imposición de la ceniza, en señal de que polvo somos y a polvo hemos de volver, o bien, arrepiéntete y cree en el evangelio, inicia hoy la Cuaresma.
Los cuarenta días de reflexión mediante el ayuno, la abstinencia y la oración es la invitación que hace la Iglesia católica a todos sus feligreses, periodo mediante el cual los católicos se preparan para celebrar la Pascua del Señor, es decir, su pasión, muerte y resurrección.
Dado los hechos violentos que se dan en nuestro estado, precisamente Jesús en un pasaje de la Biblia menciona que hay demonios que sólo con ayuno y abstinencia pueden salir y esa es la invitación para todos los que profesamos la fe católica, que el odio, la violencia y el afán de poder que genera ese tipo de situaciones lo combatamos con la reconciliación con nosotros mismos, con ?las personas y con Dios en busca de la paz, señaló firmemente el presbítero José Antonio Berrelleza Mercado.
Invitación
Mencionó que la práctica religiosa de la Cuaresma siempre ha sido muy fervorosa, por lo que nunca se ha perdido entre los católicos. Aun así, dijo que la Iglesia invita a vivir lo que en esta Cuaresma se practica y no sólo la exigencia de asistir a cumplir con ello, sino a vivir lo que en esos 40 días se recibe.
El presbítero de la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario invitó a todos los católicos a unirse al acto de imposición de ceniza y practicar en la vida cotidiana la oración, el perdón, la abstinencia y el ayuno.
Así como nosotros nos preparamos cuando se celebra un año de vida, unos 15 años o cualquier otra fiesta, que dedicamos un tiempo de preparación para esa fecha, la Iglesia dedica estos 40 días como una preparación para celebrar la Pascua del Señor y recibir la ceniza, pero sobre todo hacer vida lo que recibimos y trasmitirlo a los demás».
Ayuno y abstinencia
El presbítero Jesús Antonio Berrelleza Mercado mencionó que durante la Cuaresma, la Iglesia manda el ayuno como una invitación a sacrificar el desayuno o la cena, mediante el cual se tiene la finalidad de dominar al cuerpo, pues significa demostrar el dominio sobre el cuerpo de uno mismo.
Asimismo, resaltó que el ayuno no es obligación para quienes no pueden hacerlo, tales como las mujeres embarazadas o amamantando, personas mayores o niños menores de seis años, así como aquellos que por prescripción médica no pueden dejar de ingerir alguno de los tres alimentos.
Sin embargo, dijo que para quienes no pueden ayunar, la Iglesia propone abstinencia, oración y la ofrenda, donde aquellos que quieran ayunar y no estén obligados a hacerlo, pueden sacrificar algo que les guste mucho hacer o comer y de esta forma cumplir con el mandato de la Iglesia católica.
Se llama carne de sangre caliente y sólo se consume la de sangre fría, esto es porque los de carne caliente eran ofrecidos en sacrificio en la antigua alianza y como el sacrificio es único el de Cristo, en el periodo de Cuaresma se abstiene en los viernes y Miércoles de Ceniza la abstención de la carne, dado que la carne es el alimento que generalmente mayor deleite trae a las personas, concluyó.
Lo que debes saber del Miércoles de Ceniza
Hoy empieza la Cuaresma, el periodo más importante para los católicos
1.- Miércoles es el día en el que comienza la Cuaresma. No es el día en el que acaba el Carnaval.
Siempre cae en miércoles (parece obvio, pero alguno duda todavía) y da igual que el año sea bisiesto porque se cuenta hacia atrás desde la misa de la Cena del Señor.
Misal romano:
En la misa de este día se bendice y se impone la ceniza, hecha de los ramos de olivo o de otros árboles, bendecidos en el Domingo de Ramos del año precedente.
2.- La ceniza no se compra en ningún sitio. Se obtiene de quemar los ramos bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior.
Muchas familias guardan los ramos o las palmas y los llevan a la parroquia los días previos.
3.- La ceniza se impone. Es un símbolo, directorio sobre la piedad popular y la liturgia. El comienzo de los cuarenta días de penitencia, en el rito romano, se caracteriza por el austero símbolo de las Cenizas, que distingue la Liturgia del Miércoles de Ceniza.
Propio de los antiguos ritos con los que los pecadores convertidos se sometían a la penitencia canónica, el gesto de cubrirse con ceniza tiene el sentido de reconocer la propia fragilidad y mortalidad, que necesita ser redimida por la misericordia de Dios.
4.- ¿A quién se puede imponer? No hace falta ser católico para que te impongan la ceniza. De hecho, muchos catecúmenos participan en la ceremonia en preparación para su bautismo el día/noche de Pascua de Resurrección.
Digamos que, en este sentido, es un «día de puertas abiertas»: creyente o no, niño, adolescente, maduro, mayor sin madurar o anciano. Todos.
5.- No hay reglas fijas para imponer la ceniza. Depende del ámbito cultural y de las costumbres locales.
En los países de tradición latina, las cenizas se imponen más hacia el pelo que en la frente, espolvoreando.
En los países del ámbito anglosajón, con agua bendita se hace una pasta y se suele «marcar la frente».
Después de la homilía, el sacerdote bendice las cenizas y las rocía con agua bendita. Luego se impone con una de estas dos fórmulas:
Conviértete y cree en el Evangelio, o
Recuerda que eres polvo y al polvo volverás. En el misal romano se dice esto mientras se canta.
6.- No es obligatorio. No es día de precepto. Aunque curiosamente sin «ser obligatorio» y siendo día laborable, suele aumentar considerablemente la asistencia a la santa misa ese día.
Tampoco es «obligatorio» confesarse. Pero, sinceramente, parece una extraordinaria oportunidad, tan extraordinaria como la que disfrutan los sacerdotes para explicar bien las cosas.
7.- La impone un sacerdote. La bendición sólo la impone un sacerdote o un diácono. Para la imposición pueden ser ayudados por laicos. Puede hacerse fuera de la celebración de la misa: la bendición e imposición de la ceniza puede hacerse también fuera de la misa.
En este caso es recomendable que preceda una liturgia de la palabra, utilizando la antífona de entrada, la oración colecta, las lecturas con sus cantos, como en la misa. Sigue después la homilía y la bendición e imposición de la ceniza. El rito concluye con la oración universal, la bendición y la despedida.
8.- Ayuno y la abstinencia, lo obligatorio. El Miércoles de Ceniza no hay obligación para los católicos de imponerse la ceniza, pero sí de hacer ayuno y abstinencia, según las normas generales y las particulares de cada diócesis.
El ayuno es obligado, al igual que el Viernes Santo, a los mayores de 18 años y menores de 60. Fuera de los límites también se puede. Consiste en hacer solo una comida fuerte al día. La abstinencia de comer carne es obligada desde los 14 años.
Todos los viernes de Cuaresma también lo son de abstinencia obligatoria. Los demás viernes del año también, aunque según el país puede sustituirse por otro tipo de sacrificio/mortificación.
Por Debate