Especialistas recomiendan consumir estas bebidas bajo vigilancia médica, ya que pueden llegar a desestabilizar el metabolismo de las personas por su alto contenido de carbohidratos
CIUDAD DE MÉXICO. Ante la alergia que desencadena en algunas personas el consumo de leche, así como la intolerancia a la lactosa, o bien, porque algunos prefieren productos que no sean de origen animal, o simplemente porque las consideran saludables y sustitutos de la leche, las bebidas de origen vegetal, como las elaboradas a base de soya, almendras, arroz, coco y avellana, han aumentado su participación en el mercado.
Al respecto, especialistas e industriales de los lácteos señalan que no se puede calificar a estos productos como sustitutos de la leche, porque ésta solamente se obtiene la glándula mamaria de un mamífero.
Blanca del Río Navarro, jefe del servicio de alergia del Hospital Infantil de México Federico Gómez explicó a Excélsior que la alergia a las proteínas de la leche como la caseína, lactoalbúmina y lactoglobulina se presenta en menores de un año y disminuye su probabilidad si el bebé ha sido alimentado con leche materna.
Los principales indicios para sospechar que el niño es alérgico a las proteínas de la leche son problemas gastrointestinales, vómito, reflujo e incluso estreñimiento crónico.
Además de cólicos y distención abdominal, en ocasiones, pueden presentar dermatitis atópica, e incluso llegar a cerrarse el pecho, como si tuviera una crisis de asma, o alterar la frecuencia cardiaca, indicó.
La recomendación universal es la leche materna, por las propiedades inmunológicas y nutritivas, las cuales no las reemplazan las fórmulas infantiles, aunque sean muy especiales, comentó.
PIDEN NO SATANIZAR
Del Río Navarro pidió no satanizar el consumo de leche, pues aclaró que la alergia al lácteo se puede heredar.
El rango de incidencia de niños alérgicos a la leche va de dos a seis de cada 100.
Aclaró que, en la mayoría de los casos registrados con alergia a la leche, los niños pueden volver a ingerirla después de los tres años, aunque en algunos casos es hasta los siete y, un porcentaje mínimo nunca puede volver a consumirla.
En caso de un niño menor a dos años resulte alérgico a la leche, se recomienda que tome un sustituto lácteo, denominado altamente hidrolizado, es decir, que tenga integrada la proteína en pedacitos, expuso.
Después de esa edad, la leche no es un alimento principal como en los lactantes, siempre y cuando el niño tenga una dieta balanceada con carbohidratos, proteínas y grasas, agregó.
A pregunta expresa sobre el consumo de bebidas vegetales en los niños, la especialista sugirió a las madres de familia leer el contenido y evitar las que tengan carbohidratos como dextrosa, porque causan obesidad.
MAYOR COSTO
Fabiola Guarneros, mamá de gemelos, refirió que a partir de que diagnosticaron a su hijo Gabriel como alérgico a la leche, ingiere una bebida vegetal, la cual resulta 50% más cara que la leche que toma Matías, su otro pequeño.
Cada litro de bebida vegetal me cuesta 41 pesos; si tomamos en cuenta que la caja trae 12 litros, el gasto es de 492 pesos, mientras que el litro de leche cuesta 17 pesos, que multiplicado por 12 alcanza un valor de 204 pesos, expuso.
Agregó que la compra de los 12 litros le permite cubrir la ingesta de sus pequeños durante 25 días.
Juan Carlos Pardo, presidente de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec), indicó que aunque el consumo de bebidas vegetales se ha incrementado desde hace una década, se trata de un producto de nicho por sus elevados precios.
Mientras un litro de leche cuesta entre 12 y 18 pesos, el litro de las bebidas vegetales va de los 23 hasta los 70 pesos. Por ello, es reducido el número de consumidores que pueden acceder a este tipo de bebidas, destacó.
El representante del sector subrayó que las bebidas vegetales no solamente tienen menos proteínas que las de la leche de vaca, acaso las bebidas de soya son las que más se asemejan, sino también aportan mayor cantidad de carbohidratos.
ESTRATEGIAS
Juan Carlos Pardo comentó que empresas del ramo de los lácteos, tanto mexicanas como extranjeras, han incursionado en las bebidas vegetales a fin de tomar una porción del mercado de las bebidas que ingiere el mexicano.
Consideramos que son un competidor más de las bebidas, más que de la leche. No obstante, reclamamos que en el empaque exprese el contenido. Las bebidas que llevan la leyenda milk (leche) son importadas y les aplica otro tipo de legislación, expresó.
En México, la empresa Lala maneja la bebida vegetal Soy Salud Almendras, y Danone, a través de la reciente adquisición de la estadunidense WhiteWave, maneja alimentos naturales como la leche de almendras Silk.
La población de 120 millones de mexicanos resulta atractiva para que cualquier empresa tome una parte del mercado de las bebidas, agregó.
Pardo consideró que estos alimentos líquidos no representan una amenaza para el sector de los lácteos, por su elevado costo, aunque aclaró que el consumo de leche en México es de entre 320 y 340 mililitros diarios, por debajo de los 500 que recomienda la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
APORTE NUTRIMENTAL
Especialistas alertan que las bebidas vegetales no sustituyen a la leche de vaca, mucho menos a la leche materna, por su bajo aporte nutrimental y alto contenido de azúcares.
Griselda López, asistente en investigación de la Dirección de Nutrición del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, indicó que aunque el aporte de proteínas de las bebidas a base de soya es similar al de la leche de vaca, no tienen las mismas cualidades.
A pesar de que las proteínas son similares, las de origen animal son de alto valor biológico, es decir, aportan los aminoácidos esenciales necesarios para el crecimiento y desarrollo del ser humano en las diferentes etapas de la vida.
Adicionalmente, al momento de digerir, las proteínas de la leche de vaca liberan en el intestino biopéptidos que benefician al sistema cardiovascular, inmunológico y respiratorio. Además, aportan calcio y fósforo, detalló.
También explicó que si bien algunas bebidas vegetales están fortificadas con calcio, éste es asimilado hasta 25% menos que el que proviene de origen animal.
A decir de la especialista, el mayor aporte de las bebidas vegetales es su alto contenido de fibra. Sin embargo, recomendó consumirla de forma natural, en alimentos como leguminosas o frutas, y no de forma líquida.
En caso de ingerir bebidas vegetales, la especialista recomendó el apoyo de un nutriólogo que evalúe las necesidades y requerimientos de cada individuo, ya que éstas pueden llegar a desestabilizar el metabolismo al contener mayor cantidad de azúcar que la leche de vaca.
ESTUDIO
- Guadalupe Velasco, directora del área químico-biológica del laboratorio nacional de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), explicó que, con base en un estudio que realizó la dependencia en 26 marcas de estas bebidas, se detectó que las leches vegetales son menos nutritivas que la de vaca y, en cambio, más caras.
- Se trata de bebidas con bajo aporte nutrimental, elevadas cantidades de azúcar, mucha agua y un costo elevado, explicó.
- Detalló que las bebidas a base de avellana y arroz concentran grandes cantidades de azúcar; mientras que las elaboradas con coco tienen grasas saturadas, que elevan el colesterol y causan problemas cardiovasculares.
- De este tipo de leches sólo la de soya tiene un contenido de proteínas cercano al de la de vaca.
- Indicó que el costo promedio de un litro de leche de vaca es de 14 pesos, mientras que el de una bebida a base de almendra es de 40 pesos.
Por Excélsior