El interés de los inversionistas extranjeros por títulos que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) va en ascenso. De acuerdo con datos del Banco de México, los flujos del exterior dirigidos hacia el mercado accionario mexicano ascendieron a 3 mil 759 millones de dólares durante el primer semestre de este año, la cifra más grande desde la primera mitad de 2014.
El mayor interés foráneo en este periodo se explica ante la búsqueda de mejores rendimientos a nivel global en los mercados emergentes, además de la confianza en la evolución del crecimiento económico de México, situación que se refleja también en un mayor potencial de ventas y de utilidades por parte de las empresas mexicanas.
Los fondos que invierten en México y China han visto los reembolsos más grandes, comentaron en un informe analistas del Instituto Internacional de Finanzas, liderados por Emre Tiftik.
Haciendo a un lado los fondos de capital de inversión en México, China y Rusia, los capitales hacia otros mercados emergentes han tenido entradas netas más modestas a raíz del referéndum del Brexit.
La apuesta de los capitales extranjeros hacia la BMV les ha retribuido buenos resultados. En el primero y segundo trimestre, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) experimentó aumentos de 6.76 y 0.19 por ciento, en cada caso. En todo el primer semestre de 2016, el rendimiento acumulado es de 6.95 por ciento.
La fiesta en el mercado accionario mexicano se ha prolongado con particular fuerza en julio, tras haber alcanzado seis máximos históricos, algo no visto para un mes desde enero de 2013.
SALEN DEL MERCADO DE DEUDA
La entrada de capitales hacia el mercado accionario contrasta con la salida que se ha registrado en el mercado de valores de deuda gubernamental por un monto de 209 mil 738 millones de pesos en el primer semestre de este año, equivalente a un poco más de 11 mil millones de dólares, de acuerdo con datos de Banxico.
Las bajas tasas de interés prevalecientes en México en lo que va del año han llevado a los extranjeros a la búsqueda de mejores alternativas de rendimiento, a pesar de las turbulencias registradas.
La fortaleza del dólar ha llevado a registrar minusvalías importantes en las posiciones del portafolio de los extranjeros en el mercado de deuda en el país.
En lo que va del 2016, la moneda mexicana se ha depreciado 8.23 por ciento. Compensar esta pérdida cambiaria ha resultado más difícil en el mercado de deuda, a pesar del incremento en las tasas del país. Más aún, entre junio de 2014 y el de 2015, el peso se depreció 42.02 por ciento.
El valor del portafolio de extranjeros en el mercado de deuda en México, medido en dólares, ha bajado de 147 mil 934 millones de dólares a 103 mil 775 millones de mayo de 2014 a junio de 2016, como respuesta a una disminución en su tenencia y a la depreciación de la moneda mexicana.
Una vía de recuperación para los inversionistas extranjeros es la compra de activos tangibles, como las acciones, que tienden a recuperarse a mayor velocidad de los efectos de la debilidad del peso mexicano.
El mayor ajuste a la baja en el portafolio de los extranjeros en instrumento de deuda gubernamental se ha dado en los Cetes, mientras que su tenencia en bonos todavía se mantiene con sesgo positivo.
Por El Financiero