Aún no llegan los apoyos ofrecidos a comerciantes del centro de Tapachula, afectados por saqueos
Karla Solís/Trascender Online Noticias
TAPACHULA, CHIS.- Propietarios de los comercios dañados tras los hechos vandálicos de hace varios días en Tapachula continúan a la espera de los ofrecimientos para reactivar la economía por parte de autoridades estatales y federales, dicen que aún no aterrizan y temen podría ser una tomada de pelo más.
El Presidente de Procentro César García afirmó, que la visita del Secretario de Hacienda del estado no les da confianza de que recibirán apoyos para reactivar establecimientos afectados, porque en otras ocasiones han sido engañados por la autoridad estatal, por lo que ahora los empresarios no saben cómo hacer para poner en marcha sus única fuente de ingreso.
Dijo, que si bien fueron muy pocos los negocios de capital tapachulteco que fueron afectados por los actos de rapiña y de saqueo, no han sido informados por las dependencias estatales del número exacto ni de la cantidad que ascienden los daños, aunque según los propios sectores empresariales calculan que superan los 80 millones de pesos.
Señaló, que el daño colateral que sufrieron los comercios del centro respecto a las ventas es muy significativo, ya que aun no se recupera la confianza entre la población, prueba de ello es que cada fin de semana según el Instituto Nacional de Migración ingresan alrededor de 4 mil turistas guatemaltecos y durante las últimas semanas apenas y superan las 500 personad.
Aseveró, que es necesario que las autoridades en realidad apoyen a los empresarios locales para que rehabiliten sus negocios, porque muchos no cuentan con capital para reactivarlos, por ello urgen créditos económicos para ponerlos en marcha nuevamente.
Mencionó, que en la reunión con el Secretario de Hacienda se prometió que los afectados serian exentos de algunos impuestos, sin embargo esto no es suficiente, sino que se necesitan apoyos económicos, pues si bien algunos empresarios ya han comenzado a reparar sus instalaciones, pero ya no les alcanzará para cubrir sus inventarios, por lo que las fuentes de empleos están en riesgo.