Karla Solís/Trascender Online Noticias
Con el inicio de la temporada de cuaresma, en la que se incrementa especialmente la demanda de consumo de pescados, mariscos frescos, productos marinos preenvasados, preparados o semi preparados, la Procuraduría Federal del Consumidor inició el programa de verificación y vigilancia 2018 y con ello evitar abusos a los consumidores.
El subdelegado de Profeco en Tapachula Emilio Pinzón señaló, que se busca inhibir la comisión de prácticas nocivas que afecten o puedan afectar la economía de los consumidores, particularmente aquellos sectores de más bajos ingresos o más vulnerables de la sociedad.
Detalló, que las acciones a verificar se practicarán particularmente en establecimientos con venta directa al público tales como centros de abasto y distribución de pescados, mariscos, pollo entre otros, que también serán verificadas en lugares con venta al menudeo y detalle, tiendas de autoservicio, tiendas de conveniencia y estacionamientos públicos.
Dijo, que la Profeco menciona que las actividades de verificación y vigencia del programa se rigen bajo tres ejes de acción: Comportamiento comercial, normas oficiales mexicanas y metrología con esta última se revisa que los instrumentos de medición empleados en transacciones comerciales, industriales o de servicios sean adecuados.
Por su parte la secretaría de salud en Chiapas a través de Brigadas de la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios incrementó las acciones de vigilancia sanitaria a hoteles, restaurantes, mercados públicos y puestos ambulantes que expenden productos del mar, así como a plantas purificadoras de agua y productoras de hielo.
La líder estatal del Proyecto Productos de la Pesca de la Dipris, Zully Farrera Pintado, señaló que las brigadas ponen especial énfasis a la vigilancia sanitaria en los mercados públicos, con la finalidad de fomentar las condiciones óptimas en el manejo y conservación de los productos del mar, así como la importancia de conocer la procedencia del producto que ahí ofertan.
Recomendó, que al comprar productos del mar, ya sea pescados o mariscos, corroborar que el olor sea fresco; las agallas deben estar rojas y la piel sin desescamarse, en caso contrario, este es un signo de que se encuentra en proceso de descomposición.