El Estado/Agencia
Aunque se limitó a dar una postura respecto al desabasto de medicamentos e insumos en los hospitales y las consecuencias de esta situación en Chiapas, el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, Fabio Martínez Castilla, criticó la huelga de hambre que mantiene un grupo de enfermeras y consideró que están siendo utilizadas como carne de cañón por algunos líderes con fines políticos.
El clérigo consideró necesario que en lugar de desacreditaciones, el gobierno del estado y las y los trabajadores manifestantes den paso a un diálogo verdadero, con el cual se cumplan cabalmente los puntos puestos en las mesa y así se logren acuerdos sanos para el bien del estado.
En repetidas ocasiones el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez evadió la pregunta respecto al desabasto de medicamentos y el mal estado de los nosocomios en el estado de Chiapas, pero fue enfático al señalar que las autoridades estatales han tratado de llevar por buen camino la comunicación con las enfermeras que llevan 21 días en huelga de hambre, en su segunda etapa.
Me parece que lo que hay que hacer siempre es el dialogo; yo lo que veo peligroso es que se use a las enfermeras como carne de cañón; por eso hago un llamado al dialogo y que no se use a las enfermeras , precisó durante la conferencia dominical en las instalaciones de la catedral de San Marcos en la capital del estado.
Lamentó que esta situación esté poniendo en riesgo la vida de algunas trabajadoras, por lo que consideró que se ha brincado el diálogo y se ha puesto en riesgo alas personas.
Habría que ser más serios y ver cuáles son realmente los acuerdos; deben mostrar los acuerdos que habían llegado, que muestren el avance, que llamen a un intermediario serio , indicó.
Reiteró que dicha disputa puede tener intereses políticos, lo que no es justo dijo- y por ello, es necesaria la presencia de intermediarios para no dar preferencia a ninguna parte, sino la solución del problema.
Cabe recordar que, pese a que el titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG), Juan Carlos Gómez Aranda ha declarado que la autoridad estatal ha venido cumpliendo, las enfermeras, como representantes de los trabajadores de la salud inconformes, han señalado que el cumplimiento ha sido mínimo a pesar del gran número de mesas de trabajo que han sostenido.