Comunicado/Trascender Online Noticias
Todo llega a su tiempo, y ese tiempo llegó; mucho se dijo y habló sobre el tema que se ventilara en diversos medios de comunicación sobre el caso de las amenazas que fui objeto vía telefónica por parte del alcalde de Unión Juárez Chiapas, Gerardo Garrido Agustín.
Hace unos días fui llamado a la oficina de la fiscalía especializada en atención de periodistas y libertad de expresión ubicada en Tapachula, para llegar a la conciliación penal con la otra parte es decir el C. Gerardo Garrido Agustín, quien me dijo que derivado de una publicación que compartí vía WhatsApp en la que despectivamente se denostaba su persona causó molestia , lo que motivó hiciera una llamada para reclamar de manera altisonante sin cuidar el vocabulario; ahí en este dialogo yo le deje muy claro, que el texto que generó molestia no fue de mi autoría y que únicamente había compartido.
En esta comparecencia ante la fiscal del ministerio publico especialista adscrito a la unidad integral de investigación y justicia restaurativa quedó de precedente la comparecencia entre la autoridad municipal de Unión Juárez y el periodista en activo quien escribe este texto.
Y no había hecho comentario alguno sobre este asunto porque preferí esperar al desahogo de cada una de las diligencias así como esta comparecencia, en la que de manera civilizada se acordó el respeto mutuo de cada una de las personas involucradas como de las familias, que a decir de mi persona es lo que más importa.
El C. Gerardo Garrido Agustín también ante la autoridad en turno dejó claro que jamás he acudido a su persona para solicitarle dinero o extorsionarle como muchos comentarios a través de algunos de sus seguidores de la red social Facebook han afirmado, así también remarcó que él no ha ofrecido nada para tratar de acallar mi labor periodística de la cual reiteró ser respetuoso siempre y cuando no se use para denostar su imagen privada.
Quiero agradecer a mi familia, amigos y compañeros de los medios de comunicación que desde que sucedieron los hechos me contactaron para saber de mi persona; a la comisión de derechos humanos estatal también por siempre estar al pendiente de este proceso, y finalmente al director de diario del sur Omar Escamilla como el resto de compañeros que desde el principio han reiterado su apoyo y solidaridad.
Damos por terminado este proceso, pero nuestra actividad periodística seguirá con el firme propósito de ayudar, dar voz a quienes no la tienen.