CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó los actos violentos ocurridos en Playas de Rosarito, donde un conductor arrolló un retén de policías federales.
En en comunicado, demandó a las autoridades que investiguen de manera expedita los hechos y se castigue a quien resulte responsable de tan reprobables acciones, evitando así que estos hechos queden en la impunidad.
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La Comisión externó su apoyo a los policías, periodistas y civiles que resultaron afectados, así como a sus familiares y compañeros de trabajo.
Por lo que hace a la actuación de las distintas fuerzas del orden, la CNDH reitera su convocatoria para que el uso legal de la fuerza pública se de en un estricto cumplimiento a la ley, a los derechos humanos, y a los protocolos que han desarrollado dichas corporaciones, refiere el documento emitido esta noche.
Del mismo modo la CNDH reitera que la violencia no debe ser la vía para expresar inconformidades, al tiempo que reprueba todo acto de abuso de autoridad.
Esta tarde, un hombre a bordo de una camioneta arrolló a un grupo de policías federales que se encuentran resguardando la terminal de almacenamiento de Petróleo Mexicanos (Pemex), en Rosarito.
El vehículo, color amarillo, traspasó de reversa las vallas de los agentes federales y atropelló a varios uniformados, quienes cuidan el acceso a la planta de la paraestatal ante las protestas de al menos 200 personas.
La camioneta huyó por el boulevard principal de este municipio limítrofe con Tijuana, hacia la autopista Escénica.
De acuerdo con reportes, las corporaciones policiales realizaron un operativo de desalojo en las instalaciones, el cual dejó al menos 30 detenidos y siete policías lesionados, de los cuales uno está grave y fue llevado a las instalaciones de la Cruz Roja.
Por Proceso
