En Resumen…

Pascual Cruz Galdámez/Trascender Online Opinión

*Sus subalternos embrocan a Roberto Domínguez en la UNICACH

Apenas en nuestra entrega anterior  nos referimos a la manera tan accidentada en que se dio la reelección del rector de la Universidad de Ciencia y Artes de Chiapas, Roberto Domínguez Castellanos, pero ni bien se ha sentado y los problemas generados por la mediocridad de sus subalternos le podrían acarrear serias complicaciones al ahora insólito y consecutivamente tres veces rector de esa casa de estudios, lo que colocaría su devastada figura política aún más por los suelos y todo porque las leyes que rigen a esa institución se las han pasado por el arco del triunfo los funcionarios que por norma están obligados a respetar y hacer valer cada uno de esos preceptos, que lejos de ser una herramienta en beneficio de la comunidad estudiantil, se ha convertido en un arma utilizada por sujetos sin escrúpulos mal llamados “formadores” de las futuras generaciones. Más bien se deben llamar deformadores de la educación, pues en el tema que nos atañe, el rector Domínguez Castellanos, podrá darse cuenta que debe poner a trabajar su cerebro a todo lo que da y deshacerse de los lambiscones buenos para nada que ahora lo tienen contra la pared, pues en la baja académica de un alumno que recientemente ocurrió en la UNICAH el afectado acudió a los tribunales para hacer valer, a través de un amparo, el derecho que le corresponde y precisamente este martes el Juzgado Sexto de Distrito en el Estado, concedió la suspensión provisional promovida por el alumno y cuyo resolutivo dice: “Con fundamento en el artículo 128, fracción II, y 129 dela Ley de Amparo, se concede al quejoso Manuel Ernesto Juárez Anza, la suspensión provisional en contra de los efectos y consecuencias derivadas de la orden de baja definitiva para el efecto de que se le permita continuar ejerciendo sus derechos inherentes a su calidad de estudiante, tales como asistir a clases, cursar las materias correspondientes, elaborar y entregar trabajos correspondientes a cada asignatura, presentar exámenes e, incluso, inscribirse en el siguiente semestre y en general goce de todas y cada una de las prerrogativas que le da su derecho fundamental a la educación; lo anterior, en virtud que de no concederse la suspensión solicitada se causaría un daño de difícil reparación, al no ser posible restituirlo en el goce de los derechos que en determinado tiempo pudo ejercer”… Efectos de la medida cautelar que encuentran sustento por las razones que informan en la jurisprudencia 2ª./J. 16/2010, de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, visible en la página 142, tomo XXXI, febrero de 2010, Novena Época, con registro 165132 del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, del contenido siguiente…. Como podrá ver y juzgar amable lector de En Resumen, el rector de la UNICACH está metido en serios aprietos derivado de la falta de información de sus subalternos o la confianza de éstos mismos de que para estas alturas Roberto Domínguez Castellanos ya no sería en mandamás ahí y sería muy fácil heredarle una ola de broncas al nuevo rector, pero, oh sorpresa, la bolita le quedó a él mismo y ahora tendrán que acatar dicha suspensión emitida por el juez. Lo peor de todo es que este caso está generando un precedente en la historia de la educación en Chiapas y hasta en el país, donde con la cintura en la mano, a miles y miles de alumnos les han dado de baja académica pese a haber cursado la gran mayoría de las materias de toda una profesión. Ojo, con el mencionado, son ya dos casos en el que a la UNICACH lo reconviene un juez. En breve el caso dos.

Para variar, en la UNICACH quién defiende a los alumnos 

El tema toral en este momento en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH), es la reelección del rector, pero nadie repara en las violaciones al derecho a la educación que ejercen varios catedráticos del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas, cuyo titular es el Dr. Alejandro Nettel Hernanz, respecto a los alumnos dados de baja definitiva, no obstante de estar cursando el 8° y último semestre. La pregunta obligada es ¿Quién defiende a los universitarios? Sobre este punto, la Ley Orgánica de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, publicada en el Periódico Oficial del Estado Número 336, Tomo III, de fecha 16 de noviembre de 2011, en su artículo 43, creó la figura de la Defensoría de los Derechos Universitarios que es la instancia encargada de la defensa de los derechos de los miembros de la comunidad universitaria en general, dentro de los cuales se encuentran los alumnos y que los dictámenes que expida tendrán el carácter de recomendación; es decir existe una defensoria de los derechos universitarios, pero qué creen amigos lectores, es letra muerta, sabe por qué, porque en la realidad, no existe dicho defensor, no obstante de estar establecida en su Ley Orgánica, esta figura no ha sido creada, nombrada y mucho menos que esté en funciones, y peor aun los alumnos desconocen que existe esta figura jurídica llamada así, es decir, no existe ni la defensoría mucho menos el defensor, aun cuando únicamente está facultada para emitir recomendaciones, puede ser un mecanismo de defensa para combatir o recurrir las determinaciones unilaterales de los órganos de gobierno de dicha Universidad, tal como lo haría la Comisión Estatal o Nacional de Derechos Humanos, pero al no existir en la realidad y mucho menos estar designado el defensor, dicho medio resulta inexistente e ineficaz para acudir a solicitar la defensa del algún alumno universitario que requiera ser defendido. Sobre este tópico, Adolfo Guerra Talayero, en su carácter de abogado general de la UNICACH y responsable de la Unidad de Acceso a la información, y ahora después de la reeelcción tendrá su premio en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos; a pregunta expresa de quién es la persona que ostenta el cargo de defensor de los derechos universitarios, contestó lo siguiente: “se informa que el defensor de los derechos universitarios no ha sido designado a la presente fecha”, esto de acuerdo a la solicitud de acceso a la información pública número UAIP/S/010/2015. Es importante precisar, que si bien es cierto que la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, con base a la autonomía de que está investida, puede expedir sus normas internas, cierto es también, que dichas normas o reglamentos internos tienen que emitirlos con estricto apego a las normas y principios que establecen tanto los tratados de derechos humanos, como la propia Constitución, ya que dichas normas establecen los procedimientos, límites y principios que deben seguirse para el dictado de cualquier norma dentro del sistema jurídico (…) Es todo por hoy y nos leemos en el próximo En Resumen…